miércoles, 30 de octubre de 2013

LA BESTIA EN EL ENSAYO

El otoño trae cambios en los hábitos de la fauna salvaje. A veces las moscas se ponen muy pesadas y buscan refugio dentro de las casas. A medida que las temperaturas bajan, esto sucede con otras especies, incluidos algunos micromamíferos que pueden entrar en graneros o garajes de construcciones rurales. 

No obstante, en algunos casos la anécdota puede vivirse con cierta inquietud. Esto es lo que les pasó, hace unas semanas, a los miembros de un grupo de música en Aranjuez. Estaban ensayando en su local (una antigua construcción de uso ganadero en el monte), cuando entre altavoces, cables y demás aparatos, surgió caminando esta criatura:


No tuve el placer de ver las caras que ponían los chicos, aunque, por lo que me han contado, se les pusieron los pelos de punta. Se trataba de un ejemplar muy grande de alacrán común o escorpión amarillo (Buthus occitanus), o al menos eso es lo que me parece en base a las características que se aprecian en la foto. La única otra especie con la que podría confundirse con facilidad es Buthus ibericus, menos común, y que se caracteriza por poseer un lóbulo en el segmento inferior de las pinzas.

El local en cuestión se encuentra dentro de una zona de cerros yesíferos, dominada por vegetación baja gipsófila adaptada a condiciones áridas (la orientación es sur). Dado que los alacranes amarillos prefieren ambientes secos, rocosos y muy soleados (por tanto, con pocos árboles), debe tratarse de un ambiente muy favorable para estos pequeños predadores. De hecho, no es el primer ejemplar que aparece en esas construcciones, aunque en este caso el tamaño y la robustez del animal dejó boquiabiertos a todos.

viernes, 25 de octubre de 2013

GALÁPAGO LEPROSO RECIÉN ECLOSIONADO JUNTO AL ALGODOR

A principios de este mes de octubre hicimos una visita al río Algodor, por debajo de la presa de Finisterre. Este curso fluvial es uno de los tributarios más importantes de la margen izquierda de la cuenca media del Tajo que, en general, no son caudalosos. Esto se debe no sólo al clima, bastante árido, sino a que estos afluentes son cortos y drenan áreas relativamente pequeñas. Además, a diferencia de lo que sucede con los tributarios de la margen derecha (norteños), estos riachuelos meridionales nacen en las elevaciones modestas de los Montes de Toledo, que recogen unos volúmenes de precipitación anual relativamente pequeños.

Con todo, originalmente el Algodor era la suficientemente caudaloso como para permitir la pesca artesanal con redes. Particularmente durante las migraciones reproductivas de bogas y barbos, en primavera, cuando grandes cantidades de estos peces remontaban el río desde el Tajo, para alcanzar sus zonas de desove. 

A día de hoy, sin embargo, apenas hay peces en su cauce. Agotado su caudal en los embalses construidos en su cabecera, la corriente del Algodor bajaba este octubre en muy mal estado. No sólo corría apenas un hilillo de agua, sino que éste era verde, muy contaminado por residuos urbanos de los pueblos ribereños.

La visita, eso sí, compensó por el paisaje, interesante por la gran cantidad de cornicabras (Pistacia terebinthus) que crecían en las inmediaciones. Además, muy cerca de la orilla del pobre Algodor, encontramos un diminuto galápago leproso (Mauremys leprosa):


Se encontraba camino del río, con toda seguridad buscando el agua después de emerger del nido. Acababa de eclosionar, porque aún se distinguía parte del saco vitelino en medio del plastrón. Las hembras depositan los huevos en primavera y hasta el mes de julio y, para ello, salen a tierra y se alejan del agua, buscando elevaciones a salvo de las crecidas. En puntos propicios, es frecuente que varias hembras pongan unas muy cerca de otras, formando agregaciones de cría. Una vez enterrados los huevos, se incuban a lo largo del verano y eclosionan a finales de la estación o en otoño. Las puestas más tardías pueden pasar el invierno latentes en el nido, para emerger ya en primavera.

Aunque resistente al frío (los inviernos en la meseta son crudos), esta tortuga acuática necesita veranos cálidos y lo más largos posible. Esto puede explicar que falte en el norte de nuestra península y que no haya colonizado más que áreas pequeñas del sur francés. La mayor parte de los miembros de su familia (Geoemydidae) son tropicales; pertenecen a una antigua estirpe de quelonios cuya cuna evolutiva se encuentra en el sudeste asiático. Nuestro galápago leproso es el geoemídido más occidental, y uno de los que alcanza latitudes más norteñas. Aún así, tiene sus límites.

Liberamos este pequeñín en la orilla del Algodor.


Lo soltamos un poco aprensivos, dado el color y el olor del agua. Su especie se encuentra en rápida regresión. Antaño muy abundantes, nuestros galápagos leprosos se hacen cada día más raros. Las principales razones son la destrucción de sus hábitats (en la que participa la contaminación) y la introducción de tortugas acuáticas exóticas.

miércoles, 23 de octubre de 2013

FRACTURA HIDRÁULICA: CUANDO NO SE ESCUCHA A LOS CIENTÍFICOS, LLEGA LA "DECEPCIÓN"

Cada día estoy más convencido de que, en el ámbito de las fuentes de energía, gran parte de las decisiones políticas y empresariales se mueven más por impulsos que en base a criterios científicos sólidos. Algo así como la bolsa, aunque tal vez más politizado. Y es que, a medida que el petróleo se agota y se vuelve un problema, las grandes compañías energéticas y los gobiernos que sirven a sus intereses, tratan de mantenerse a flote alimentando expectativas halagüeñas para el futuro.

De esta manera, se insiste en que, de acuerdo a la lógica capitalista, el encarecimiento del producto alentará nuevas inversiones para mejorar los mecanismos de extracción. Lo que, a su vez, debería abaratar su procesamiento y precio final. Desde sus medios de comunicación, no dejan de repetirnos que están llegando soluciones en forma de nuevas técnicas, que permitirán acceder a nuevos yacimientos de combustibles fósiles. Que la fractura hidráulica o la extracción en alta mar, nos traerán, una vez más, energía barata y crecimiento económico. ¡Hasta el calentamiento global será una bendición! Sí, ¿a quién le importan los millones de personas que perecerán de hambre o enfermedades, cuando la subida del mar inunde sus regiones costeras y se vean desplazados en masa? ¿Qué más da si el cambio climático arruina sus precarios sistemas agrícolas en el Tercer Mundo? ¡Podremos acceder a yacimientos de petróleo en el Ártico, gracias a la desaparición del casquete de hielo polar! ¿No es fantástico?

En realidad, siempre se trata de lo mismo: mantener la ficción de que, pese a todo lo que nos está pasando, nos espera un futuro brillante. Que todo tiene solución, y que aquellos que ponen esa máxima en cuestión, sólo son unos exaltados. Pero, efectivamente, las ficciones ficciones son. Hace tiempo que expertos reputados e independientes vienen avisando de que, pese a todo, nada volverá a ser como antes. Que la extracción de hidrocarburos en alta mar o en el Ártico es y será, inevitablemente, un proceso muy caro y arriesgado (que se lo digan a Shell). O que el "fracking" sólo aportará cantidades relativamente pequeñas de combustible que, además, seguirán siendo caras y constituirán un gravísimo riesgo para la salud de la gente que viva cerca de las explotaciones.

Sin embargo, es tan grande el deseo de creer, tan desesperada la necesidad de confiar en el futuro de nuestro sistema, que ninguna evidencia científica puede nublar el "mantra" de la oficialidad político-empresarial: todo volverá a ser como antes, sólo tenemos que soportar un poco más...

¿O no? Al final parece que, incluso los directivos de algunas compañías, están acabando por darse un baño de realidad (al menos de vez en cuando):

El Director General de Shell habla de decepción con los esquistos tres meses antes de abandonar su cargo


(Traducción del artículo publicado el 7 octubre 13 em The Financial Times por Saleha Riazn)
El Financial Times ha hablado con el Director General de Shell Peter Voser. Tres meses antes de abandonar su cargo, Voser dijo lamentar la “enorme apuesta” – de 24.000 millones de dólares USA como mínimo– realizada por la compañía en los esquistos en Estados Unidos.


Según Voser: “Los no convencionales no han dado exactamente el resultado esperado… Esperábamos tasas de flujo mayores y con ellas más escalabilidad para una compañía como Shell.”

También declaró que la actividad en sentido ascendente (Upstream) de la compañía en América se estaba resintiendo debido a “una decisión estratégica de ralentizar” en los esquistos en caso de enfrentarse a precios bajos del gas. “Así, uno se encuentra con más de 3.000 millones de depreciación cuando no tiene los recursos para compensarla,” dijo.

Este mismo año en agosto, Shell hizo pública una caída del 60% en beneficios en el segundo semestre, en gran medida como resultado de una amortización de más de 2.000 millones de dólares USA sobre el valor de sus activos en esquistos ricos en líquidos en Norteamérica, después de lo cual declaró que revisaría la estrategia de su cartera en Estados Unidos.

“Costes más elevados, gastos de exploración, efectos adversos del tipo de cambio y problemas en Nigeria han tocado nuestra línea de flotación…Estos han sido claramente resultados decepcionantes para Shell,” dijo Voser entonces.

Además, la semana pasada la compañía anunció planes de venta de su parte de 106.000-acres en la formación de pizarras bituminosas de Eagle Ford en el Sur de Tejas, después de un descuento de 2.200 millones de dólares USA en sus negocios de esquistos a principios de este año.

FT informa de que Shell “entró en el sector de los esquistos en América tardíamente y que algunos inversores le acusaron de pagar los activos por encima de su valor. Entonces sus beneficios se vieron afectados por un boom del suministro que empujó los precios del gas a la baja a mínimos de hace 10 años.”

Según el informe del FT: “Desde que asumió el cargo de Director General en 2009, se le atribuye la revisión de la estructura notoriamente compleja de la compañía y la realización de algunos de los mayores proyectos de la historia de Shell, entre ellos una planta de conversión de gas en líquido de 19.000 millones de dólares USA en Qatar.”

En cuanto al boom de los esquistos en Estados Unidos, considera que es “excesivo”, y que la exploración podría conducir a la decepción, y aunque afirmó que China era uno de los países que tenían un mayor potencial con respecto a los esquistos, piensa que podría haber problemas, porque los costes en China son más altos que en Estados Unidos.

Le sustituye en el cargo el actual responsable de refino y comercialización de Shell, Ben van Beurden.