miércoles, 23 de diciembre de 2009

CRISIS Y BENDICIONES, LA LUZ QUE SURGE DEL CAOS

He recibido un correo de mi amigo José Luis, en el que reflexiona sobre los efectos de la gran crisis global que se ha desatado, por lo que de positivo puedan tener algunos de ellos para el medio ambiente. Y por tanto para todos nosotros. Éstos son algunos:

LA DEFORESTACIÓN DEL AMAZONAS CAE UN 82%

http://www.galiciae.com/nova/23897.html

La deforestación de la selva amazónica disminuyó un 82% entre los meses de agosto y diciembre de 2008 en relación al mismo periodo del año anterior, a causa de la crisis económica, según informaron fuentes oficiales.

En estos meses se destruyeron 635 kilómetros cuadrados de selva frente a los 3.433 en el mismo intervalo de 2007, según datos de la organización no gubernamental Instituto del Hombre y el Medio Ambiente de la Amazonía (Imazon), que corroboró y explicó el ministro de Medio Ambiente, Carlos Minc.

El ministro atribuyó esta disminución en los niveles de destrucción de la selva a las acciones del Gobierno, así como al impacto de la crisis económica que ''debe ayudar a reducir la deforestación este año'' hasta por debajo de 10.000 kilómetros cuadrados, cifra inédita desde que se tienen registros.

Disminución de precios

Según Minc, existe una relación entre la caída de los precios de los productos agropecuarios en el mercado internacional, que se desplomaron a partir de octubre, y la disminución de la deforestación.

La mayoría de denuncias por la destrucción de la mayor selva tropical del planeta se acumula en los extensos plantíos de soja que se expanden en la frontera sur de la Amazonía, según datos oficiales.

''Este hecho, no obstante, tiene un desfase de un año para otro'', matizó el ministro, quien aseguró también que los mayores efectos de la caída de precios comenzarán a notarse en el mes de abril.


LA CONSTRUCCIÓN DE NUEVAS VIVIENDAS SE HUNDE CASI UN 50% EN EL PRIMER TRIMESTRE

http://www.rtve.es/noticias/20091221/construccion-nuevas-viviendas-se-hunde-casi-50-tercer-trimestre/307077.shtml

El sector de la construcción sigue sufriendo el ajuste causado por la crisis económica, de forma que el número de viviendas iniciadas en España en el tercer trimestre ascendió a 33.140 unidades, el 47,2% menos que en el mismo periodo del año pasado, según datos publicados por el Ministerio de Vivienda.

Respecto al segundo trimestre del año, la iniciación de viviendas ha disminuido el 19,6%, debido a la caída tanto de la construcción de inmuebles libres como protegidos.

En el tercer trimestre del año comenzó la construcción de 16.466 viviendas protegidas, lo que supone una caída del 18,3% respecto al mismo periodo del año pasado y un descenso del 20% respecto al trimestre anterior.

La nueva edificación de vivienda libre disminuyó el 60,8% con respecto al tercer trimestre de 2008, hasta contabilizar los 16.674 inmuebles de julio a septiembre, que supusieron un descenso del 19,3% respecto al segundo trimestre del año. Del total de viviendas iniciadas entre julio y septiembre, el 49,7 por ciento era protegida y el resto, libre.

También caen las viviendas acabadas

En cuanto a obras terminadas, en el tercer trimestre se finalizó la construcción de 83.524 viviendas libres, el 13,4% menos que en el segundo trimestre del año y un 40,5% inferior que entre julio y septiembre de 2008.

Las viviendas protegidas finalizadas sumaron 16.062 unidades en el tercer trimestre del año, un descenso del 13,1% respecto al trimestre anterior, si bien experimentó un aumento del 23,5% frente al mismo periodo de 2008.

Asimismo, entre octubre de 2008 y septiembre de 2009 se concluyó la construcción de 444.544 viviendas, lo que representa un descenso del 35,1% respecto a los doce meses anteriores.


LA CRISIS CONTIENE EL CONSUMO DE AGUA

http://intra.ada.gba.gov.ar/intra/infoagua/200903/noticias/199127.html

El suministro de agua potable de la mitad sur de la provincia de Alicante está en manos de la Mancomunidad de los Canales del Taibilla (MCT). Este organismo abastece a una población estable de 2,5 millones de habitantes (que se disparan por encima de los 3 millones en verano) distribuida entre 79 municipios de la cuenca del Segura. De ellos, 34 están en la Vega Baja y el Bajo y el Medio Vinalopó, otros 43 pertenecen a Murcia (toda la Región excepto Yecla y Jumilla, en la comarca del Altiplano) y los dos últimos -Férez y Socovos- son de la provincia de Albacete. También hay entidades mancomunadas como AENA, la Confederación Hidrográfica del Segura o las propias Fuerzas Armadas, entre otras, aunque su incidencia en la demanda es insignificante.

La MCT cerró el año 2008 con un consumo total de 212 hectómetros cúbicos, un 6% menos que en 2007. Ese ejercicio fue el primero que el organismo consiguió cerrar con un consumo menor que en el precedente. Suministró exactamente 226 hectómetros cúbicos de agua potable, uno menos que el año anterior. Sin embargo, el año pasado ese recorte en la demanda ya no fue tan testimonial. Los 14 hectómetros cúbicos de diferencia que hay entre uno y otro ejercicio equivale aproximadamente a la cantidad de agua que consume al año una población del tamaño de Callosa del Segura, con un censo de entre 15.000 y 20.000 habitantes.Desde el organismo que preside Isidoro Carrillo se inclinan más por atribuir ese significativo descenso a una conjunción de factores que ligarlo exclusivamente a la crisis económica, aunque admiten que "la crisis del ladrillo se tiene que notar por fuerza, porque es un sector que demanda exclusivamente agua potable de calidad". Aunque las mismas fuentes son reacias a facilitar información desglosada por municipios para comprobar la incidencia real de esos consumos en las zonas que más se han desarrollado urbanísticamente en los últimos años, la relación causa-efecto es obvia.

El sector industrial tampoco le va a la zaga, ya que salvo contadas excepciones, también se abastecen de agua potable y, como la construcción, tampoco atraviesa su mejor momento.En cuanto a la reducción de la demanda doméstica, en la Mancomunidad también son conscientes de que la crisis económica ha podido tener un efecto directo en el ahorro. Muy a su pesar, bastante mayor incluso que las campañas informativas que con cierta periodicidad ponen en marcha tanto este organismo y el Ministerio de Medio Ambiente como las distintas administraciones locales y autonómicas para concienciar a los ciudadanos de que el agua es un bien escaso por estos pagos.Otro dato significativo es que casi un tercio de los 212 hectómetros cúbicos consumidos era agua desalada, ya que las principales plantas desalinizadoras en servicio (Valdelentisco, San Pedro del Pinatar I y II, Alicante I y II fundamentalmente) produjeron el año pasado un caudal total de 70 hectómetros cúbicos (10 más que en 2007), según los datos facilitados por la MCT.

Las aportaciones que más se han incrementado son, no obstante, las del propio río Taibilla, ya que de un año a otro casi se han triplicado al pasar de 13 hectómetros cúbicos en 2007 a 34 el año pasado.Por el contrario, las transferencias del trasvase Tajo-Segura se han reducido, aunque menos de lo que la estadística pueda indicar en bruto, sin leer la letra pequeña. El año pasado, entre el acueducto y las aportaciones extraordinarias sumaron 108 hectómetros cúbicos, de los cuales, unos 70 procedían de trasvases directos. No obstante, a esa cantidad habría que sumarle también la práctica totalidad de las aportaciones extraordinarias (38 hectómetros cúbicos), ya que en este capítulo se incluyen los casi 37 hectómetros cúbicos que la Mancomunidad de Canales del Taibilla compró a la comunidad de regantes del Canal de las Aves de Aranjuez para garantizar el suministro durante el tramo final del pasado año hidrológico.

Quedan más de ocho meses por delante para ver cómo va a evolucionar la demanda de agua potable de los municipios este año, pero a tenor de las nulas perspectivas de que el sector de la construcción remonte el vuelo y con la actividad industrial también atenazada por la crisis, las posibilidades de que el descenso en el consumo sea todavía más acusado que en el pasado ejercicio 2008 son bastante elevadas. Casi una certeza


EL CONSUMO DE PETRÓLEO CAERÁ ENTRE EL 7% Y EL 10% ESTE AÑO

http://www.elperiodico.com/default.asp?idpublicacio_PK=46&idioma=CAS&idnoticia_PK=630784&idseccio_PK=1009

El descenso de la actividad de sectores como la construcción, la aviación o el transporte por carretera está provocando una caída del consumo de productos petrolíferos nunca vista en los últimos 25 años. Según la Asociación Española de Operadores de Productos Petrolíferos (AOP), el año se cerrará con un descenso del consumo de entre el 7% y el 10%.

«La cosa va mal», señaló a Efe el director general de la AOP, Álvaro Mazarrasa. El consumo privado ha caído menos que el industrial, cuya demanda se ha contraído considerablemente por la bajada de la actividad en sectores como la construcción, el turismo y el transporte. Sin embargo, según Mazarrasa, el sector mantiene sus inversiones pese al mal momento por el que atraviesa en términos de márgenes y ventas.

Los mayores recortes de consumo se registran en los destilados medios (gasóleos y querosenos de aviación). El descenso en el consumo aeronáutico es «espectacular» y una novedad porque siempre había registrado tasas positivas, salvo tras el 11-S y la guerra de Kuwait, sucesos tras los que remontó inmediatamente. «Estamos viendo caídas del orden del 17% y los augurios para el verano son bastante malos», aseguró.

En cuanto a los carburantes de automoción, en las estaciones de servicio ubicadas en carreteras y con una mayor dependencia de transportistas de mercancías y pasajeros, las ventas han caído entre el 25% y el 30%, mientras que en las gasolineras urbanas el retroceso es de entre el 4% y el 5%. «El consumo privado no se está comportando tan mal debido al abaratamiento de gasolinas y gasóleo», afirmó Mazarrasa, ya que estas cuestan un 30% menos que hace un año, cuando el crudo marcó su precio máximo histórico.

«Apostamos por el futuro y nuestro mensaje es de optimismo», dijo el director general de la AOP, quien recordó que las petroleras están haciendo un esfuerzo inversor «muy importante y a contraciclo» que arrastra a otros sectores, como la ingeniería y los bienes de equipo, y que permite mantener y crear empleo.

Sobre el precio del petróleo, que terminó la semana pasada con destacables subidas (el Brent recuperó el nivel de los 65 dólares), Mazarrasa aseguró: «Los mercados de futuro apuestan por un precio a largo plazo de 85 dólares por barril y tanto productores como compañías piensan que es un precio que garantiza mantener las inversiones. Podríamos ver precios de entre 60 y 70 dólares a corto plazo».

.....

Así que cuando entramos en crisis y nuestras sociedades sufren de desempleo y precariedad, nos encontramos con varias paradojas: la falta de demanda desactiva la voracidad con la que se deforesta la selva amazónica para establecer cultivos de soja o criar vacas. Tal vez la disparatada demanda de soja, que crece día a día en Occidente, y que es uno de los motores de la destrucción de las selvas tropicales, se haya hundido con la falta de liquidez. Además asistimos al tan esperado estallido de la burbuja inmobiliaria de nuestro país, destructora de nuestro territorio y devoradora de nuestros recursos, que ha servido para enriquecer escandalosamente a una minoría sin escrúpulos, además de generar una dinámica económica y política perversa. Desgraciadamente la burbuja ha llegado tan lejos que su desaparición supone un lastre pesadísimo para el empleo y la recuperación económica de nuestro estado. Y a su vez, caen el despilfarro de agua y petróleo.

En mi opinión debería establecerse un debate social y político en relación con el sistema económico que domina las sociedades de nuestro planeta. ¿Cómo puede ser que aspiremos a prosperar y a garantizar el futuro de nuestros descendientes, si nuestro sistema es tan destructor e insostenible cuando todo marcha bien, y sólo da un respiro cuando entra en una crisis demoledora? Es evidente que debemos cambiar muchas cosas, y el tiempo corre.

martes, 15 de diciembre de 2009

UNA VUELTA POR EL ENTORNO DE LAS CHARCAS DE VELILLA DE SAN ANTONIO

El pasado domingo 13 de diciembre nos dimos una vuelta al atardecer por el camino que recorre la margen izquierda del río Jarama a su paso por Velilla de San Antonio. Es un paseo muy bonito en cualquier época del año, ya que si a un lado queda el río y su bosque de ribera, al otro queda el conjunto de charcas resultantes de la actividad de graveras antiguas. Todo el eje del curso bajo y medio del Jarama, en el sureste de la Comunidad de Madrid, fue tradicionalmente un paraíso al que acudían las familias los fines de semana atraídas por sus generosas playas de arena fina, las aguas cristalinas y un entorno verde y frondoso. Al menos fue así hasta mediados del siglo XX, y de hecho se refleja en nuestra literatura, como en la novela El Jarama, de Rafael Sánchez Ferlosio. Sus valores naturales impulsaron la creación del Parque del Sureste, que tantos disgustos ha dado a la larga a nuestros políticos más depredadores.

Sin embargo, con dar un simple paseíto, uno puede advertir como el paraíso se encuentra seriamente amenazado, y ya gravemente dañado. Lo cual hace que su belleza sea más sorprendente aún. Al comienzo de la ruta, el camino sale de un parque donde se encuentra plantado un buen número de árboles y arbustos exóticos. Bordea una primera charca, que hace de transición entre el polígono industrial de Velilla y las charcas más naturalizadas. En esta primera, varias especies de árboles exóticos se encuentran plantas por las orillas, aunque destacan el sauce llorón (Salix babylonica) y el paraíso (Eleagnus angustifolia), como este ejemplar:



La costumbre de utilizar árboles alóctonos en ambientes naturales, semi naturales, o próximos a parajes sensibles, parece no crear ningún tipo de problema de conciencia en nuestros políticos. Y eso pese a que, como veremos más adelante, es una práctica de altísimo riesgo. Plantear a nuestros gobernantes que las reforestaciones deben realizarse de un modo racional y con planta autóctona, está fuera de su entendimiento, ya que por lo general echan mano de lo más barato que tengan en el vivero más próximo.

Árboles aparte, las charcas están llenas de aves acuáticas en esta época del año. Aquí, aunque de lejos, se puede ver un bando de cucharas (Anas clypeata):



Desde luego, el pato cuchara es la especie estrella de la zona, con unas concentraciones que llegan a ser impresionantes. Otras especies también comunes son el ánade real (Anas platyrhynchos) y el porrón común (Aythya ferina). Había pescando varios cormoranes grandes (Phalacrocorax carbo), que además tienen un dormidero importante en otra de las charcas locales. En el paseo también pudimos observar zampullines chicos (Tachybaptus ruficollis) y fochas (Fulica atra) en el Jarama, así como gallinetas (Gallinula chloropus) y otras especies más comunes.

La ribera del Jarama presentaba una estampa crepuscular apacible, muy agradable:



Pero ya en esta foto podemos observar varias cosas que ni Sánchez Ferlosio, ni los visitantes de fin de semana de antaño, habrían podido ver en este lugar. Para empezar, nos desplazamos por un camino elevado, que discurre por una loma artificial que, a modo de muro, traza una frontera nítida entre la ribera y el entorno. Originalmente el Jarama tenía amplias llanuras de inundación, pero desde la segunda mitad del siglo XX se ha realizado un verdadero espolio de sus planicies inundables. Para arrebatárselas, se han creado muros como éste. El resultado: un río que se parece cada vez más a un canal.

Vemos también un bonito bosque de galería, que flanquea el río formando un apretado reborde en la poca orilla que le queda. Actualmente los bosques de este tipo que aún podemos observar están dominados por el chopo blanco (Populus alba):



Coexiste con el chopo negro (Populus nigra), el sauce blanco (Salix alba), así como los taráis (Tamarix sp). No obstante, en un pasado reciente los bosques ribereños tenían una estructura mucho más dinámica y una composición mucho más compleja. Dado que el Jarama se desbordaba estacionalmente, una parte importante de su llanura inundable estaba sujeta a episodios de crecidas destructoras, que arrasaban la vegetación. Dichas crecidas aportaban también arenas y gravas, procedentes de la erosión de las rocas de la Sierra de Guadarrama. La destrucción de la vegetación más expuesta, y los depósitos de arenas, generaban las famosas playas del Jarama, que durante el verano eran la delicia de tanta gente. Podría parecer que esa dinámica fluvial dificultaba enormemente la formación de los bosques ribereños, pero en realidad producían un escenario cambiante y heterogéneo, ya que el río se desplazaba através de su llanura de inundación a medida que los depósitos creaban islas o nuevos meandros. Cuando el Jarama se iba retirando de una zona, ésta era rápidamente colonizada por árboles adaptados a sobrevivir a inundaciones ocasionales. Sobre todo los sauces y sargas. Detrás, les seguían los chopos. Tras ellos, los fresnos, y más allá, en los suelos fértiles pero firmes, los olmos. Unos bosques complejos y dinámicos, sometidos a cambios profundos que a su vez eran el motor de su propia riqueza.

Con la construcción de los grandes embalses de la cuenca alta del Jarama, el Lozoya y el Manzanares, se acabaron las crecidas estacionales, y también se acabaron las arenas. Como consecuencia, las playas han desaparecido rápidamente, y los bosques se han atrincherado y espesado junto a la misma orilla del agua. Allí donde nunca hubieran podido establecerse si el Jarama no hubiese sido "castrado" a base de muros y compuertas.

Eso no significa que el río no fluya (aunque muchos desearían que ni una gota de agua se "tirase al mar"), y como ya no puede expandirse por su llanura de inundación, y además no deposita sedimentos, actualmente erosiona su propio cauce en vertical. En consecuencia cada vez se hunde más en el terreno, y a medida que lo hace también se hunde el nivel freático de la zona. Eso significa que, a medio plazo, los bosques ribereños supervivientes comenzarán a declinar y a secarse. De hecho, ese proceso ya se observa en sus límites exteriores. En ese declive y empobrecimiento, incluso puede apreciarse como algunas especies de árboles antaño muy abundantes, que incluso formaban bosques de consideración, tienen ya una presencia puramente testimonial y relicta. El olmo (Ulmus minor) se encuentra en un número muy escaso. En cuanto al fresno de hoja estrecha (Fraxinus angustifolia) se puede considerar raro.

A este panorama, provocado por acciones humanas dentro y fuera del Parque del Sureste, se suman otras amenazas más recientes. Y es que, por ejemplo, varias especies de árboles exóticos están penetrando en los ecosistemas ribereños y lagunares. En el caso de Velilla de San Antonio, todas ellas proceden de los parques y jardines urbanos, y de las plantaciones realizadas en la charca del polígono industrial. Por ejemplo, este ejemplar joven de paraíso crecía a un kilómetro del parque más cercano:



Muchos más ejemplares pueden encontrarse en las charcas, y a distancias mayores. Otro árbol en proceso de asilvestramiento es el arce negundo (Acer negundo), como éste, también en las charcas:



También el ailanto (Ailanthus altissima):




El olmo siberiano (Ulmus pumila) y la morera (Morus sp), se encuentran asímismo ganando terreno, sin que existan planes de gestión, control y erradicación.

Y si la flora se encuentra en un proceso de tranformación, de resultados preocupantes y muy inciertos, la fauna no escapa a ese mismo fenómeno. Por ejemplo, los mamíferos. Sí, es cierto, cada vez sorprende menos encontrar huellas de jabalí en este lugar:



Y es una buena noticia, porque la especie ha vuelto por sí sola. Lamentablemente, otras huellas más inquietantes nos son también cada vez más cotidianas: las del mapache y el visón americano. Hasta hace unos años, dos eran seguramente los mamíferos más fáciles de encontrar por aquí: el conejo y la rata de agua (Arvícola sapidus), dos especies nativas de hábitos crepusculares. Ciertamente el conejo no sólo sigue siendo abundante, sino que probablemente nunca lo ha sido tanto. Sus conejeras atraen muchos merodeadores, como la gineta o el mustélido que dejó éste excremento:



En cambio, los destrozos en la entrada de esta otra madriguera tienen como autor a uno de los zorros que habitan en las charcas:



Pero, ¿y las ratas de agua? Pues a ésas hace algún tiempo que no se las ve. Las alteraciones en la dinámica fluvial del Jarama han hecho desaparecer la mayor parte de los herbazales inundables y las praderas ribereñas. La vegetación palustre y riparia se ha ido volviendo cada vez más leñosa y envejecida, inapropiada para este roedor vegetariano y semiacuático. Y además, la irrupción del visón americano, capaz de exterminar localmente a nuestro roedor nativo, ha supuesto tal vez el golpe de gracia.

Dentro del Parque del Sureste, resulta llamativo observar cuán grandes han sido las consecuencias de actividades desarrolladas fuera de sus confines. En mi opinión es un ejemplo claro de cómo los parques necesitan de una gestión global, ya que dependen de que su entorno se mantenga también en un estado de conservación adecuado.

lunes, 14 de diciembre de 2009

Y LOS TOPILLOS VUELVEN, PUNTUALES COMO UN RELOJ



Ya había escrito sobre los topillos anteriormente en este tema:

http://viviendoisephanim.blogspot.com/2009/06/topillo-campestre-explosiones.html

Y ahí me refería a que la explosión demográfica de topillos campesinos volvería a la Meseta Norte. Pues bien, ni las previsiones de los científicos ni los roedores en cuestión han defraudado: ¡ya están aquí! Y como muestra, este artículo:

http://www.agroinformacion.com/noticias/1/Agricultura/22521/una-plaga-de-topillo-vuelve-a-amenazar-los-cultivos.aspx


Una plaga de topillo vuelve a amenazar los cultivos

ASAJA PALENCIA rechaza las declaraciones de la consejera de Agricultura y Ganadería de la Junta de Castilla y León, Silvia Clemente, realizadas en el pleno de las Cortes, por las que asegura que no hay repunte de topillos.

10/12/2009

ASAJA invita a la consejera a visitar las fincas de la zona de Campos invadidas de topillos, para comprobar el avance de la plaga, que está provocando serios daños en los cultivos. Si a principios del otoño ASAJA comprobaba los daños en cultivos como el girasol o la remolacha, ahora los daños son visibles en cereales, mostrando múltiples rodales que se van extendiendo a gran velocidad y amenazan la cosecha. Y ello a pesar del “control y la vigilancia” de la Junta. ASAJA considera que los efectivos humanos y materiales dispuestos por la Administración regional son insuficientes para enfrentar las proporciones del problema, y exige a la Junta que ponga soluciones reales y efectivas frente a la superpoblación de topillos que alcanza ya los mismos niveles, en muchas zonas, que el que se registró entre 2006 y 2008. El presidente de la organización agraria advierte que “si no se pone fin a la plaga, asistiremos a una nueva catástrofe como la de entonces, con las consecuencias económicas y sanitarias que todos recordamos” y añade que “ni se ha compensado económicamente a los agricultores afectados y que las consecuencias sanitarias aún colean”.

También en este otro artículo de prensa:

http://www.laopiniondezamora.es/comarcas/2079/topillo-vuelve-escena/240061.html

El topillo vuelve a escena

La Orden de la Consejería de Agricultura que autoriza la quema de cunetas, linderos y desagües de parcelas en las comarcas de Campos-Pan y Bajo Duero aún no ha tenido aplicación en Zamora, a pesar de su publicación, el pasado 7 de noviembre. La organizaciones agrarias mucho se temen que se establezca el plan de quema «cuando vengan las lluvias», por ello demandan la «inmediata» aplicación de la medida contra la plaga de topillos que en la provincia podría haber sufrido un repunte, como se indica desde las organizaciones agrarias, tanto Coag como Asaja y Upa.

La preocupación vuelve a ser latente después de un "periodo de gracia" y los agricultores vuelven a ver a los roedores zonas del este de la provincia. El Grupo Parlamentario Socialista preguntará hoy por las medidas previstas por el Gobierno regional para afrontar el «rebrote» de la plaga de topillos. Un hecho admitido implícitamente por la propia Consejería de Agricultura al autorizar el refuerzo de medidas co la quema de cunetas y lindero. La propia Orden explica que «después de las medidas de lucha implantadas se hace necesario intensificar las actuaciones en determinados lugares que se han constituido en reservorios». Ante esta situación, el presidente de Coag, Miguel Blanco, considera «justificadísmo» activar, tanto la comisión de seguimiento de la plaga constituida por la Junta en verano, cuando la situación era más crítica; como la que reunía periódicamente a los representantes de la Cámara Agraria con el Servicio Territorial de Agricultura. «Sobre las últimas medidas no se nos ha consultado nada, ni a las organizaciones ni a la Cámara; estamos a la espera de que se establezca un calendario sobre las quemas de cunetas. Nuestro planteamiento es que se actúa en todas a lo largo del otoño e invierno y se evalúe el repunte, no sólo en las zonas no tratadas sino en todas». Para Blanco, la caída de la plaga de topillos «se ha demostrado que tuvo un carácter coyuntural y fue de forma natural. Las quemas fueron muy limitadas, la limpieza también y los tratamientos químicos realmente tuvieron efecto al principio». El presidente de Coag advierte que «si no se ataca lo que se ve ahora, la plaga puede trasladarse a la siguiente campaña y en primavera podemos estar perdidos. En estos momentos la situación es peor que en noviembre de 2006 y, o se adoptan medidas, o el repunte puede ser peligrosísimo». Vicente Calzada, presidente de Asaja, no ha dudado en cuestionar la efectividad de las medidas adoptadas al final del verano -quema de rastrojos y productos químicos-, que «fueron puro marketing. Nosotros pedíamos una quema masiva, una limpieza intensa de cunetas, quemar todos los perdidos. Dijimos en su momento que lo que se había hecho era insuficiente y esta intensificación de la plaga nos viene a dar la razón».

Para Aurelio González, secretario provincial de Upa, «el problema es gravísimo, se nos vuelve a ir de las manos como ha pasado este verano. Las quemas de cunetas y linderos ya deberían haber empezado y así se lo dije personalmente el jueves pasado al delegado territorial. Cuando quieran desarrollar la Orden de la Consejería empezará a llover y no quiero ni pensar lo que va a ser la próxima primavera. González habla directamente de «plaga, porque en muchas zonas arando a vertedera se van claramente las camadas nuevas. Hay que actuar urgentemente».

La Unión de Pequeños Agricultores se plantea promover movilizaciones en Zamora «si la Administración no actúa rápidamente. Vuelven a negar la evidencia», concluye.

Extraídas del siguiente enlace, éstas son las principales conclusiones de los técnicos:

http://blogs.20minutos.es/cronicaverde/post/2009/12/13/vuelve-plaga-los-topillos

Alarmas aparte, ahora sabemos más sobre estos animales y su control que hace una década.

El veneno no sirve

Investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) han demostrado recientemente que la plaga de topillos desapareció de forma natural y no por los tratamientos con rodenticida llevados a cabo.

Frente a esta evidencia científica, los expertos señalan cómo los venenos afectaron muy negativamente a otras especies animales, especialmente rapaces, y tuvieron un fuerte impacto sobre la biodiversidad. Fueron los efectos colaterales.

La producción agraria aumentó

Los mismos investigadores del CSIC señalan que no hay evidencia de que la plaga afectara dramáticamente a la producción agrícola. De hecho en 2007, el año de la plaga, la producción de cereal, patatas y viñas fue la más alta registrada en los últimos diez años.
Y hay más. El coste de la campaña de control, 24 millones de euros, fue más alto que los pagos compensatorios por daño a cultivos, que ascendieron a 5,5 millones de euros.


El veneno extendió las enfermedades

Un nuevo estudio científico ha demostrado exactamente lo contrario de lo que los políticos decían. El uso abusivo de venenos favoreció la expansión de la tularemia entre los humanos. La mayor presencia de cadáveres en el campo provocó la extensión de la enfermedad entre los animales, por canibalismo o inhalación. Y al pasar las cosechadoras, la bacteria entró en contacto con los agricultores. Más de 500 personas padecieron la enfermedad en la región a lo largo de 2007.

¿Podemos acabar con los topillos?

Ni con los topillos, ni con las ratas, ni con las cucarachas. Debemos aceptar a la Naturaleza tal y como es, acostumbrarnos a vivir con ellos, nos gusten o no. Y aprovechar a sus enemigos naturales, rapaces y carnívoros, para controlar sus explosiones demográficas.

Que la plaga iba a regresar estaba cantado. Debido a su patrón casi cíclico, los investigadores ya anunciaron que el próximo repunte se produciría en torno a 2010 ó 2011. Y así será.

¿Qué podemos hacer?

Sería deseable que para la próxima primavera, cuando arrecien las protestas de los agricultores y las televisiones vuelvan a airear el tema, exista una mejor planificación técnica, buena coordinación y una información más seria. Para ello es necesaria la colaboración de todos, políticos, gestores, agricultores y científicos.

El estudio recuerda que el manejo de plagas debe basarse siempre en la evidencia científica, apoyándose en una gestión sostenible y ecológica que evalúe el balance coste/beneficio. ¿Habremos aprendido la lección o, como los topillos, nuestros errores también son cíclicos?


Y ahora, la gran pregunta... ¿qué hará la Junta? ¿Seguirá haciendo el ridículo y ya de paso poniendo en peligro a multitud de animales y personas? ¿Alguien dimitirá por lo pasado en el anterior ciclo de topillos? Bueno, eso último es una pregunta retórica. Pero yo al menos tengo curiosidad por ver como se defienden nuestros gobernantes.

miércoles, 9 de diciembre de 2009

EL CAMBIO CLIMÁTICO Y LA CONTAMINACIÓN ATMOSFÉRICA REDUCEN LAS PRECIPITACIONES EN MADRID

Se acaba de publicar un trabajo muy interesante sobre este asunto. Adjunto enlace y resumen:

http://www.globalizate.org/global120909.html



El cambio climático y contaminación atmosférica reducen las precipitaciones en Madrid

La asociación Globalízate ha realizado un amplio estudio de 73 páginas sobre la evolución de las precipitaciones de 8 observatorios de Madrid con datos facilitados por la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).

Los observatorios objeto del estudio han sido: Puerto de Navacerrada, Fuente el Saz, Aeropuerto de Barajas, Soto del Real, Hoyo de Manzanares, Parque del Retiro en Madrid, Torrelodones y Talamanca del Jarama. La serie de datos de todos los observatorios comienza aproximadamente en 1945 hasta 2009, excepto para el parque del Retiro cuya serie de datos comienza en 1893 hasta la actualidad.Los resultados principales del estudio han sido:

- Atravesamos el periodo más seco en los últimos 55 años.

- Las precipitaciones comienzan a evaporarse antes.

- Los meses de enero, febrero, marzo, junio y septiembre han sufrido descensos en la precipitación media mensual superiores al 30%.

- El mes de octubre es el único que registra un ligero aumento de precipitación.

Se ha observado una reducción de la precipitación media anual en todos los observatorios de estudio. Esta reducción oscila entre las reducciones moderadas del parque del Retiro (8.2%), Fuente El Saz (8.8%) y Navacerrada (8.8%) y las extremas de los observatorios de Torrelodones (23.6%), Soto del Real (20.6%) y el aeropuerto de Barajas (19.7%). Los observatorios de Talamanca del Jarama y Hoyo de Manzanares sufren un descenso intenso del 15.4% y del 12.2%, respectivamente.

Es importante la reducción de precipitaciones en todas las zonas, pero especialmente en las zonas que son cabeceras de cuencas hidrográficas. El significativo descenso de las precipitaciones de Navacerrada, Soto del Real y Hoyo de Manzanares, junto con la subida de las temperaturas medias anuales en la región hace que dure menos la nieve en las montañas, principal reserva de agua para los arroyos y ríos que nutren gran cantidad de pantanos de la Comunidad de Madrid.

Las causas de este descenso se deben a que cada vez pasan menos frentes y se forman menos centros de bajas presiones al oeste de la península que favorecen las lluvias más intensas en el centro peninsular. Esto a su vez, está relacionado con el aumento de las temperaturas en Groenlandia y la pérdida de hielo marino de la banquisa Ártica como consecuencia del calentamiento global.

En el estudio, se han encontrado indicios de que la contaminación atmosférica generada en Madrid capital, cinturones industriales y el tráfico aéreo en el aeropuerto de Barajas, podría estar inhibiendo la precipitación. De hecho, por encima de Torrelodones y Soto del Real circulan muchas aeronaves en sus trayectorias de despegue y aterrizaje en Barajas.

La región de Madrid podría haber entrado en un círculo vicioso consistente en que por culpa del cambio climático las situaciones anticiclónicas, estables y sin lluvias son cada vez más frecuentes. Estas situaciones de estancamiento provocan una acumulación de contaminantes y cuando llegan las lluvias, hay menos de las que habría en zonas limpias porque la contaminación suprime la precipitación. Por otro lado, las políticas de crecimiento tienden a crear ciudades más grandes que necesitan a su vez más agua, más energía y producen una mayor emisión de contaminantes lo que acentúa la reducción de la precipitación en las cabeceras de las cuencas hidrográficas.

El estudio ha contado con la inestimable colaboración de observadores de meteorología, un Doctor en ecología y el investigador Amir Givati, de la universidad Hebrea de Israel, experto en estudios sobre contaminación atmosférica y reducción de las precipitaciones.



Foto en la que se aprecia como un frente nuboso se deshace sobre la ciudad de Madrid, formándose un hueco de cielo despejado:



Para descargar informe:

http://www.globalizate.org/InformePRECP091209.pdf