Así estaban las tomateras a principios de Julio:
Así están ahora, a mediados de agosto:
Creo que parte del éxito del tamaño y número de frutos se debe a que riego las matas con agua (y algas) del estanque que también tengo en el jardín, con su correspondiente dosis de excrementos de peces. Vamos, que hay mucha materia orgánica por ahí. Eso sí, ni fertilizantes ni insecticidas, ni nada por el estilo. Y como producto final, unos tomates de primera, algunos de ellos bien grandes, que hemos podido comer en ensaladas, pisto, gazpacho, ...
¡Recomendado!
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